Mi padre se ha pasado el fin de semana entrando y saliendo de urgencias. Su estado físico es bastante delicado: insuficiencias todas (renal, hepática, respiratoria, cardiaca), marcapasos, diabetes...77 anos. Lleva unos meses fastidiado. Su cuerpo requiere una combinación de fármacos difícil de mantener en equilibrio y últimamente apenas puede caminar, se asfixia y no puede comer lo que le gusta.
Yo en mi fuero interno me pregunto: y todo eso, ¿par qué? ¿para qué la vida de esa manera?
No sería más lógico, ahora que ya no puede hacer nada de lo que le gusta, y además sufre, dejar que la naturaleza siga su curso.
Me reprocho a mi misma ese tipo de pensamientos, pero hablando con mi hermano me dijo que pensaba eso exactamente. Así que no soy la única. Los dos queremos a mi padre, eso por descontado, pero los dos creemos que no debería ser la vida por encima de todo, como parece creer nuestra cultura. Es duro, pero es así.
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Siento muchísimo leer esto y espero que tu padre mejore lo antes posible.
ResponderEliminarYo, al igual que tú y tu hermano, soy de la opinión que las personas tienen que vivir lo que vivan, y cuando estás en ese estado, me parece que ya vives poco. Ese ansia por alargar la vida es algo que me parece hasta inhumano.
Un besote muy fuerte y mucho ánimo Verónica
Hoy lo ingresaron, comparte habitación con una momia viviente. Quién sabe, igual se recupera lo suficiente y vuelve a disfrutar de alguna cosilla.
ResponderEliminarGracias por tus ánimos.
Ya sabes dónde estoy para lo que quieras.
ResponderEliminarUn beso